2 de junio de 2010

Los Llanos de Abraham. Canadá, último capítulo!

Los Llanos de Abraham es un enorme espacio público abierto en medio de la ciudad de Quebec de !44 hectáreas!!! Parece que se llamas así, porque "Abraham" fué el primitivo nombre de la ciudad... En la noche del 13 de septiembre de 1759, las tropas inglesas atravesaron en bote el río San Lorenzo y atacaron en ese lugar la ciudad de Quebec sin dar a los franceses tiempo de organizarse siquiera. La famosa batalla de "Los Llanos de Abraham" duró exactamente 15 minutos. Desde entonces, Canadá es colonia inglesa. El parque de "Los Llanos de Abraham" se convirtió en el primer Sitio Histórico de Canadá. Es una explanada enorme donde Robpom dice que en verano se organizan todo tipo de deportes, juegos y actividades ciudadanas. El lugar está justo al lado del museo de Bellas Artes de Quebec y me encantó, de verdad, un espacio abierto tan grande, y ver a la gente esquiando !en mitad de la ciudad!....y a cualquier hora del día! . . Tanto me gustó que Robpom me prometió que esquiaríamos una vez más antes de mi regreso a España...y que sería en "Los Llanos de Abraham". Fué lo último que hicimos, dejamos nuestro apartamento, cargamos el coche con todo lo que teníamos, y antes de enfilar carretera de vuelta a casa, nos pusimos los esquíes y esquiamos una vez más con un maravilloso día soleado, en el parque más bonito de toda la ciudad de Quebec! . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Lo que hace todo el mundo es seguir el surco toooodo alrededor del parque...empiezas en un punto y después de darle la vuelta a todo el parque terminas en el mismo lugar...Yo le dí 2 vueltas...y Robpom le dió una más. . . Este es el último capítulo de mi excepcional viaje a Canadá, que duró 22 días (del 27 de enero al 17 de febrero), un viaje en el que fuí feliz, y que también ha dado muchísimo de sí (he escrito muchos capítulos en este Blog). He disfrutado muchísimo contando todas las experiencias y sensaciones que he tenido...Me llevo a Canadá en el corazón para siempre. . . . Hasta Siempre, Canadá!

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