La plantación de arces y el sueño de Robpom

En Magog, el padre de Robpom tiene terreno con arces plantados, Jean- Claude tiene ya sus buenos 84 años, pero viene a este terreno todos los días, sin excepción, cuida las lindes, limpia las calles entre los arces, despeja las malas hierbas, para que la cosecha de "savia de arce" sea la mejor posible cada año. Durante todo el año, Robpom se deja caer en el terreno para ayudar a su padre, lo hace los fines de semana, cuando tiene tiempo. Muchas de esas ocasiones, Noemie, su hija le acompaña. A Noemie le gusta aquello mucho también. Cuando más trabajo tienen en la plantación es en primavera, cuando llega el deshielo, por que es el momento de extraer el agua del tronco de los arces para hacer el delicioso Jarabe de Arce... "producto nacional" en Quebec. Cada año incorporan mejoras en el terreno: Un año le pusieron nombre a las "calles"... cada nieto de Jean- Claude tiene una calle. Y desde que decidieron extraer el agua de los troncos de los arces de la propiedad han tenido mucho trabajo...por lo visto, los árboles necesitan luz, y los arces tienden a crecer demasiado juntos, hay que cortar uno de cada tres para que los que se quedan, den buena savia. En todo el terreno extraen la savia de unos 350 árboles. Como aún lo hacen de manera artesanal, yendo ellos personalmente a vaciar los cubos, 350 son una buena cantidad, teniendo en cuenta que el trabajo hay que hacerlo a diario durante unas 3 o 4 semanas. Tan solo lo hacen en aproximadamente un tercio de toda la propiedad, que tiene más, muchos más de 1000 arces. Otra de las mejoras que le han hecho al terreno ha sido la construcción de una cabaña de madera... ellos solitos, padre e hijo lo han hecho todo. Robpom está encantado, piensa pasar muchas de las noches de verano en aquella cabaña, sin un ruido, disfrutando de la naturaleza...

Han tardado varios años en construirla, pero se trataba de disfrutarla, no de correr.

1ª fase, el suelo

2ªfase, el esqueleto

3ªfase, el armazón

Esta foto la saqué yo el pasado febrero, este es el resultado, después de ponerle las ventanas. Robpom ya ha dormido alguna vez... me ha invitado a acompañarle... pero le he dicho que me lo pensaré!

Robpom adora venir aquí, lo hace siempre que puede... dice que es aquí donde le gustaría vivir, construirse una casa bien moderna dentro de la propiedad y vivir rodeado de arces... y de nada más!